15/9/07


Ahora la paz
el día del milagro
cuando se abren las aguas
el amor
deja sus huellas sobre el mar.
Sólo podemos ver y oír
la luminosa voz de lo que crece
cantan las liras de la hierba: así cantamos.
Bajo el sol
el esplendor dorado del verano.
La vida abraza, nos rodea
hay manzanas deseadas
y racimos perfectos de cerezas
caballos blancos, sapos
cristales de agua, escarabajos
colibríes pequeños
plateados peces
rosas
lilas.
Descienda el beso
la caricia se estire como un manto
la lengua intensa, el soplo
dos blandas plumas en las manos infinitas.