3/7/07

Distancias


(Sobre una relato de Walter Benjamin acerca del acto de peinarse, en la mañana)


Alisa
alinea o desenreda
su peine antiguo
cede paso al torrente
ese agua dulce
que hizo flotar los sueños
se devora de a uno
los dorados erizos de sus ondas castañas,
los deshace, despacio, entre los dientes
-sus diques afilados de carey-

El hombre mira:
¿soy yo la que se peina delante el espejo?

(los espejos ven todo
pero callan las cosas que el reflejo no abraza)

Cada imagen resuena:
una copa quebrada
sobre la ajena simetría de la alfombra.

El peine nos aleja
de la región del sueño
con meditada astucia,
socava la más densa arquitectura.
Un horror distraído
desencanta los palacios que habitamos
en las noches que crees
que has dormido a mi lado.

3 comentarios:

Plaza Aydesa dijo...

oia! y eto?
besos
puetiles y prolifitos

inx dijo...

Y no sabe qué laburo...Me la paso fregando.

Plaza Aydesa dijo...

hay que comprar la aspiradora de oficina! jojo ;)